El primer domingo de julio del año 2027, se realizará la elección de gobernador para sustituir a la primera gobernadora electa en Guerrero.
Faltan más de 2 años, pero con el año nuevo inició el activismo de los que aspiran a gobernar a los guerrerenses. Hay quienes tienen la fuerza y la estructura para llegar hasta el final y los hay quienes, como en los jaripeos, hacen el papel de la mona, o sea, sólo animan y distraen al público mientras se preparan el verdadero jinete y el toro.
Por Morena, la lista sin duda la encabeza Félix Salgado Macedonio, quien se defiende una y otra vez señalando que la reforma contra el nepotismo y la reelección no tiene dedicatoria para él. Sin embargo, hay quienes aseguran que el senador no está en el ánimo de la presidenta Sheinbaum. Quienes lo conocemos sabemos que Félix es Félix. Si es por él, va hasta el final. Es protagonista de innumerables elecciones y su presencia en las regiones de Guerrero y arrastre popular son el principal argumento para considerarlo un fuerte contendiente.
Beatriz Mojica. Ya contendió por la gubernatura en 2015, en condiciones adversas por la desaparición de los estudiantes normalistas en Iguala, que fue utilizada a lo largo de la campaña, donde, pese a ello, obtuvo una votación de casi medio millón de votos, pero perdió frente a Héctor Astudillo. Hoy, en las filas de Morena, a Beatriz Mojica se le identifica como cercana a un grupo de “claudistas” de la Ciudad de México, y recientemente participó en Cuernavaca en una reunión donde no participaron seguidores de Salgado Macedonio, lo que generó la especulación de que se trataba de un bloque para enfrentarlo en la elección interna. Mojica Morga tiene trayectoria, tiene fogueo nacional, no tiene señalamientos de corrupción y sus tres campañas estatales le garantizan ser considerada una contendiente seria.
En corrillos morenistas se menciona con insistencia a Esthela Damián Peralta como una aspirante para la gubernatura. Se dice, entre otras cosas, que cuenta con el visto bueno de la presidenta Sheinbaum y que ya operan en las regiones los servidores de la nación en su favor. En estos tiempos, es difícil que llegue alguien con carrera política en la Ciudad de México a gobernar Guerrero.
Abelina López Rodríguez, la reelecta alcaldesa de Acapulco, jugó a favor de Marcelo Ebrard en la interna por la Presidencia. Eso le valió ganar con cuña la candidatura a la reelección, pero sin duda eso mismo la aleja del equipo ganador en su partido. Difícilmente será tomada en cuenta a la hora de las definiciones. Abelina ha sumado a su causa decenas de dirigentes de la izquierda histórica, que pueden lucir en un templete, pero enfrenta el reto de convencer a los guerrerenses de que es una buena opción para gobernar Guerrero. Los complejos problemas de Acapulco la han mostrado falta de liderazgo, una visión corta, como ocurrió durante los bloqueos de damnificados y la toma de los sistemas Papagayo por parte del Cecop. En resumen: Abelina debe demostrar que sabe gobernar, porque está demostrado una y otra vez que quien gobierna mal Acapulco, queda fuera de la carrera por la gubernatura.
Javier Saldaña Almazán, el poderoso rector de la UAGro, desde hace décadas ha sido visto como un posible candidato a gobernar Guerrero. Durante años ha sabido sortear las tempestades políticas. Lo cierto es que, nos guste o no, Saldaña ha sido y es un factor de poder en la política guerrerense y muchos candidatos y candidatas han hecho pactos con él, y ahora puede capitalizar esto si decide competir por la gubernatura. En el último proceso electoral se le vio cercano al PVEM.
Por el PRI, Manuel Añorve ha anunciado su ya cantado interés de ser nuevamente candidato a gobernador. Añorve ha participado también en innumerables procesos electorales, ha ganado y ha perdido. A Añorve ya lo conocen los guerrerenses. Y eso juega a su favor y en su contra. Esta vez, el ometepequense emprende este proyecto con un PRI muy disminuido por el éxodo de liderazgos y militantes encabezados por Héctor Astudillo.
Por el PRD, en su versión de partido estatal, los visibles serían Carlos Reyes Torres y Evodio Velázquez Aguirre. Sin embargo, la pérdida del registro nacional les quitó reflectores en Guerrero. Es innegable la presencia del Sol Azteca en marcadas regiones del estado. De ahí que sus cerca de 200 mil votos pueden inclinar la balanza en 2027.
Hay figuras que han sido relevantes en política, como Mario Moreno Arcos, Alberto López Rosas y Rubén Cayetano García, que en los meses que vienen con seguridad estarán en la disputa por las candidaturas.
Mención aparte merece el polémico Pedro Segura Valladares. No se le ve cerca de ningún partido, pero ya manifestó su interés por ser gobernador. Muchos lo ignoran y descalifican, pero creo que su discurso desparpajado y en contra de toda la clase política en general, bien enfocado, con estrategas de alto nivel en su war room, puede pegarle un susto político a muchos.
Hay tiempo para ello. Veremos.