Por Evodio Velázquez // El principal reto del gobierno en sus tres órdenes es la SEGURIDAD. La consolidación de la 4t en su segundo piso pasa porque funcionen las estrategias diseñadas para recobrar la seguridad de los mexicanos.
Inició un nuevo Gobierno, diría yo un nuevo régimen encabezado por nuestra presidenta de la República, por primera vez una mujer, la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, mujer experimentada, científica y con un alto nivel político.
Hablemos de su mano dura, al dar un manotazo en la estrategia realizó reformas profundas en materia de administración y procuración de justicia, así como dar vida a una súper Secretaría de Seguridad Ciudadana encabezada por un alto perfil policíaco y operativo, como lo es Omar García Harfuch, un hombre que conoce las entrañas de la policía y el gran aporte de la coordinación con las demás fuerzas Armadas como el Ejército, Marina y Guardia Nacional.
Hoy tiene en sus manos dicha coordinación y está obligado a implementar la estrategia presentada por la presidenta, destacando la prevención social y atacando las causas que generan la violencia y delincuencia, el uso de inteligencia al mayor nivel tecnológico y la coordinación operativa con todas las fuerzas de seguridad nacional.
Esta estrategia desde mi punto de vista empieza a dar resultados que se miran y salen a la luz, como el decomiso de miles de dosis de droga incautada, lo que logró que no llegara a envenenar a miles de jóvenes en el país y en los EUA principalmente; se pudo también detener a un buen número de delincuentes dando golpes a las principales organizaciones delictivas, destacando el operativo “Enjambre” en el EdoMex y otros más en Sinaloa.
La situación en materia de seguridad se mira fuera de control con miles de muertes violentas en el país; destacando estados como Guanajuato, Sinaloa, EdoMex y Guerrero principalmente.
Nuestro estado es una de las entidades más azotadas por la violencia y hoy agravada esta situación en Acapulco por los estragos de los fenómenos meteorológicos Otis y John; todo ello ha generado un ambiente complicado en la economía sin poder activar el turismo que es la principal palanca de desarrollo, pegando duro en los bolsillos de los acapulqueños y guerrerenses.
La zozobra que se mira en las demás regiones del estado destacan en las noticias a diario; en la capital, Chilpancingo, de manera principal el gran pendiente de no dejar impune el asesinato de Alejandro Arcos Catalán, en paz descanse mi amigo. Hay que reconocer que hay avances pero con todo ello no se ha podido devolver la tranquilidad a las familias de la capital.
Lamentablemente ya no sólo es frecuente la extorsión, hoy vemos secuestros de personas inocentes y delincuencia común. Esa es la cruda realidad que vivimos.
Con todo ello hoy se respira un aire de esperanza después de la visita hace unos días de la presidenta Claudia Sheinbaum, al convocar en Acapulco, aquí en Guerrero, a la sesión del Consejo de Seguridad, con todos los gobernadores del país y el gabinete de Seguridad.
Hacer esa reunión aquí significó mucho para nosotros, porque miramos que hoy se está tomando el estado como PRIORIDAD NACIONAL, se mira también al destacar todo el respaldo y reconocimiento a nuestra Gobernadora Evelyn Salgado Pineda, de quien me da gusto verla activa cerrando el año con fuerza, encabezando las acciones de reconstrucción y dando banderazos a obras importantes y emblemáticas para el puerto.
Me da gusto también escuchar en corrillos políticos y ciudadanos que hoy el gobierno federal está resuelto a aplicar la estrategia de seguridad con determinación.
Nosotros decimos que es momento de recobrar la tranquilidad de las familias buenas y de trabajo que buscan ser parte de un renacimiento de nuestro pueblo. Si se recupera la tranquilidad y se avanza dando resultados en la seguridad, regresará la inversión y el turismo a Acapulco y con ello nuestra tranquilidad y bienestar.
Esos son los deseos de fin de año, e inicio de un nuevo 2025, de millones de ciudadanos en el mundo que queremos ver Acapulco nuevamente brillar.