Baltazar Jiménez Rosales // Los directivos del organismo público descentralizado Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), que ahora se llama Alimentación para el Bienestar, prefieren dejar pudrir o exportar al extranjero el maíz que compran a productores guerrerenses antes que vendérselo a productores de porcinos o a los industriales de la masa y la tortilla.
Tras hacer esta acusación, el dirigente de la Asociación de Porcicultores del Estado de Guerrero, Sebastián de la Rosa Peláez, afirmó que son cientos de toneladas de maíz compradas por Segalmex las que se pudren en canchas al aire libre o en bodegas improvisadas, ya que el organismo paraestatal perteneciente a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) del gobierno federal, desafortunadamente no cuenta con los silos para el almacenamiento adecuado del grano, es decir, no tiene la infraestructura apropiada para ello.
Dijo que lamentablemente Segalmex, ahora llamado Alimentación para el Bienestar, está convertido en “otro acaparador” de maíz, aunque lamentablemente, contrario a venderlo a precio de garantía a los porcicultores del estado o a los industriales de la masa y la tortilla, que lo han reclamado, se lo lleva de Guerrero o, en el caso más grave y deplorable, lo deja pudrir en las canchas techadas de los pueblos, por lo que rápidamente se echa a perder.
Mencionó que en otros casos, el maíz que compra Segalmex es colocado a la orilla de la carretera de la Costa Chica, que es la zona que regularmente recorre precisamente Sebastián de la Rosa, sólo “protegido” con láminas encima. Esta práctica, comentó, la ha detectado en el camino de Ometepec antes de llegar a Juchitán, y de Tecoanapa hasta la comunidad de El Limón, en Juan R. Escudero, igualmente, “le ponen nailon encima nada más”, refirió.
Detalló que el hecho de que el maíz únicamente sea cubierto con estos materiales que no son los adecuados, lo que provoca es que se humedezca y se serene, porque el plástico finalmente se vuela con el aire, por lo que finalmente se pudre y se daña completamente.
Refirió que otra parte del maíz es exportado por Segalmex al extranjero, y aunque dijo no tener datos precisos, manifestó que “yo tengo información, no puedo precisar con un dato exacto, porque Segalmex es una caja de pandora, Segalmex es un secreto, es un información clasificada, no hay información exacta, pero tenemos información que ese maíz está siendo exportado al extranjero, concretamente a Brasil”.
Mientras tanto, expresó, “en México seguimos consumiendo maíz amarillo”, en tanto que en el caso de Guerrero no hay maíz suficiente, lo cual hace que los porcicultores, que es el problema que él y sus compañeros sufren a diario, no tengan grano suficiente para alimentar a los animales.
Esto hace, señaló que “de contrabando” y valiéndose de terceras personas compren en las tiendas de Segalmex de cinco a seis bultitos de maíz, mientras que en el caso de los industriales de la masa y la tortilla de la entidad ya pudieron signar un convenio con el gobierno del estado para la comercialización del grano a precios de garantía.
Con este ejemplo, comentó, la Asociación de Porcicultores del Estado de Guerrero ya trabaja en un acuerdo para que Segalmex les venda el maíz antes de echarse a perder o exportarlo a otros lugares, porque “aquí lo necesitamos”, recalcó De la Rosa Peláez.
Refirió que en las oficinas de Segalmex de Guerrero el argumento que ponen para no venderles el maíz es que ellos no son los que deciden sino que lo hacen desde las oficinas centrales: “imagínate nada más lo absurdo, en Guerrero el maíz echándose a perder y que se llevan a dónde, y para que les vendan a los guerrerenses donde se produce maíz blanco, lo tiene que traer quien sabe de dónde, no se sabe de dónde”, apuntó.
Dijo que otra traba que pone el gobierno federal para poder venderles maíz es que los porcicultores les vendan 45 toneladas de maíz “de contado”, algo que para los productores de carne de cerdo no es costeable porque representa una cantidad arriba de los 200 mil pesos.
Por lo anterior, mencionó, la contrapropuesta de los porcicultores es que en caso de poder compras las 45 toneladas de maíz de contado, Segalmex se las libere conforme vayan utilizando el grano, porque en Guerrero no hay un solo porcicultor que tenga la capacidad para comprar 45 toneladas a la semana: “lo que planteamos es la intervención del gobierno federal de manera directa para que nos puedan vender en alguna bodega en las regiones, en Costa Chica, en Costa Grande, en Zona Centro, en Acapulco en Zona Norte, donde haya porcicultores que nos puedan vender de manera directa”, comentó.
Reiteró que la idea es que no haya condicionamiento de que sean 45 toneladas semanales y que lo paguen y les llegue semanas después, porque los porcicultores no pueden esperar tanto tiempo, aunado a que no cuentan con el capital suficiente. La intención es que el maíz que se produce en Guerrero, se quede en Guerrero, pero sin condiciones y conforme lo necesiten, insistió finalmente el dirigente de los porcicultores de Guerrero.