El fondo de la transformación en la nación tiene ciertos derechos y lecturas de admisión, aunque también decisiones de cambios en el desarrollo de los estados, no obstante que se requiere más crecimiento en algunos renglones sociales.
Para Angel Aguirre Rivero el valor de la política vigente esta basado en una sútil variación en aciertos, y al igual en errores que han permitido a los gobiernos aceptar en modificar y corregir desaciertos para avanzar en la conversión.
El ex gobernador de Guerrero hace política de buenas intenciones en razón con los cambios del presente, reconociendo la actual etapa de la transformación del país con el liderazgo generacional en los gobiernos de México.
Y efectivamente, no se podrá conducir en la práctica de la transformación, si en los gobiernos no hay actores políticos estadistas, es decir, factor de unidad que tenga calidad moral para darle dirección al progreso de los estados
En opiniones encontradas en las distintas fuerzas partidistas, particularmente en el movimiento de Morena, perciben a Angel Aguirre como un político vigente que sabe actuar en cordura con las formas y tiempos propios en esta fase de transformación.
Muestra de ello, la prudencia en separar cualquier inclinación preferencial en el pasado proceso electoral, poniendo en el centro el interés y valor del control politico en vigor, y dejando a un lado también las cuestiones de oportunismo particular.
Por eso, en variadas opiniones como actualmente, lo viene practicando en sus comentarios en una cadena de televisión nacional; al ex gobernador se le escucha, y se percibe al político congruente y estadista en aptitudes con visión de Estado.
“Angel Aguirre es un político audaz que sabe jugar en juicio y razón con todas sus canicas”, fue una percepción de actores al interior de los partidos al reconocer la sobriedad política del ex mandatario con el fondo a los cambios vigentes en el país.
Lo referente es el contexto cuando se entiende y se aceptan las formas y los tiempos para aspirar, por lo que, el modelo de política en Aguirre Rivero no se basa en el chantaje ni en la manipulación con quienes tienen el control politico actual.
Es decir, no se pelea con los adversarios en los escenarios de la aspiración, bajo preceptos de egoísmo, oportunismo y rivalidad, aunque, con eso no implica hacer réplica sobre los aciertos y errores a veces a falta de cordura política.
De tal manera que el ex gobernador de Guerrero se mantiene al margen de la descalificación con quienes gobiernan los estados, principalmente con la política que viene construyendo en estos casi 50 días del gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo.