Marcial Campuzano // En la capital del estado no habrá toque de queda como parte de las estrategias que se aplican para garantizar la seguridad de la población, dijo el secretario de Seguridad Pública en Guerrero Josué Barrón Sevilla, ante los hechos de violencia registrados en las últimas fechas en la ciudad, entre éstos el asesinado del alcalde Alejandro Arcos y del secretario general del ayuntamiento Francisco Tapia Gutiérrez.
Además, sostuvo que con la colaboración de soldados de la Secretaría de la Defensa Nacional, de elementos de la Guardia Nacional y de la Policía del Estado, hay fuerza suficiente para garantizar la seguridad de los 3 millones de guerrerenses, y afirmó que los últimos indicadores señalan que la incidencia delictiva en el estado va a la baja.
El responsable de la seguridad pública en el estado, señaló que derivado de los acuerdos establecidos entre los miembros de instituciones que participan en la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz, “se han determinado estrategias para garantizar la seguridad y el orden con acciones de proximidad social y la prevención de delitos.
La buena coordinación que tiene el gobierno del estado con la Secretaría de la Defensa Nacional y con la Guardia Nacional, ha permitido tener presencia “en la cual la sociedad tenga cercanía con la Policía del Estado y otras autoridades, lo cual ha permitido tener tranquilidad”, indicó.
Entrevistado en el zócalo de Chilpancingo cuando realizaba un recorrido de supervisión con el subsecretario de Asuntos Políticos Francisco Rodríguez Cisneros, aseguró que cuentan con una fuerza suficiente “que está garantizando la seguridad en la región Centro y en las 8 regiones de la entidad”.
El Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la policía estatal coordinan acciones para garantizar la seguridad a 3 millones de guerrerenses, agregó el funcionario.
De acuerdo a los últimos informes, informó, la incidencia delictiva en Guerrero disminuyó, tan es así que en la presentación de la estrategia de seguridad nacional llevada a cabo el pasado martes en la ciudad de México, se dijo que Guerrero tiene una disminución en delitos.
Dio a conocer que la Secretaría de Seguridad Pública del estado reforzó de manera robusta la seguridad en Olinalá, en donde el pasado martes 2 presuntos delincuentes fueron detenidos, linchados y quemados vivos presuntamente por miembros de la sociedad civil.
Hay en Olinalá trabajos de prevención del delito y socialización como parte de la estrategia, dijo el secretario de Seguridad Pública. Señaló que la Fiscalía General del estado investiga los hechos.
No compartió señalamientos que hicieron periodistas, en el sentido de que su presencia en el zócalo es sólo mediática. “Desde que iniciamos los trabajos hay supervisión permanente”, respondió.
“La policía estatal mantiene una permanencia en toda la entidad, Guerrero es un estado grande con muchas dificultades de tránsito, con caminos averiados, pero pueden tener la seguridad que con la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional y la Policía del Estado estamos llegando a todas las áreas aunque están alejadas”.
Dijo que los toques de queda no pueden ser detonados, son temas que se tienen que determinar a nivel constitucional, y que no forman parte de las estrategias que se buscan para garantizar la seguridad pública de los ciudadanos.