La presencia de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, el miércoles en Acapulco, vino a tranquilizar y dar esperanzas a la población acapulqueña y guerrerense, con la diferencia que tendrá que apoyar a los 75 municipios devastados por el huracán “John”.
Las afectaciones más considerables se registraron en Acapulco, con inundaciones y derrumbes. En municipios de la región Centro, La Sierra, La Montaña, Tierra Caliente, Costa Chica y Costa Grande, el desbordamiento de ríos y arroyos ocasionaron daños mayores en miles de viviendas humildes, y el corte de caminos rurales, quedando aislados sin recibir la ayuda oficial, excepto las comunidades donde se pueda entrar.
Son más de medio millón los guerrerenses que sufrieron estropicios de mayor o menor grado, podrá constatarse con la visita de los “Servidores de la Nación”, con el Censo de las familias en desgracia.
La infraestructura hotelera no sufrió daños en la mayoría de sus instalaciones; solo algunos servicios turísticos de playa resultaron dañados, ello permitirá la reactivación inmediata del turismo.
Los gobiernos federal, estatal y municipal, tendrán que dar atención prioritaria a los damnificados en albergues o que permanecen en sus casas anegadas, con alimentación en comedores, despensas, enseres domésticos y recursos económicos para la rehabilitación de sus hogares, tal como apoyó el presidente Andrés Manuel López Obrador, por el “Otis”.
Se necesita la amplia solidaridad del gobierno de la República y los mexicanos, para el pronto restablecimiento de las actividades productivas y económicas, y se resulte lo menos perjudicado en los ingresos y bienes.
Las tareas desplegadas por los tres órdenes de gobierno y voluntarios, han sido muy intensas e incansables. La gobernadora Evelyn Salgado Pineda, ha hecho lo suyo desde el primer momento que tuvo conocimiento de la proximidad del huracán “John”, en las costas de Oaxaca. Se dio a la tarea de desplegar un operativo emergente para salvaguardar la integridad de las familias costachiquenses, y en Acapulco, en coordinación con la alcaldesa Abelina López.
La presidenta Sheinbaum Pardo tendrá que disponer de un presupuesto superior a los 25 mil millones de pesos, para atender adecuadamente y de manera directa, a miles de guerrerenses que han sufrido pérdidas materiales y vidas humanas.
Las reparaciones de carreteras, puentes, caminos, escuelas, centros de salud y demás servicios públicos, requieren la reparación inmediata dentro de una estrategia planificada de trabajo e inversión pública.
La mandataria nacional debe tomar en cuenta el extraordinario apoyo del pueblo de Guerrero, a su candidatura con la más alta votación jamás obtenida por algún candidato presidencial, con un millón 110,844 mil votos, equivalente al 71.66%, de la votación total.
Guerrero y las entidades de Tabasco, Oaxaca y Quintana Roo, aportaron los porcentajes más elevados de sufragios del país, a Claudia Sheinbaum Pardo y a los candidatos morenistas.
Ante el desastre provocado por “John”, resulta imprescindible la frase obradorista: “Amor con amor se paga”. Veremos y diremos.
Marea Baja.- De plácemes se encuentra el sector turístico porteño por el nombramiento de Noé Peralta Herrera, como secretario municipal de Turismo, desplazando a David Abarca Rodríguez, quien solo se dedicó a echar abajo el trabajo del anterior titular, José Luis Basilio.
Peralta Herrera es un político inquieto que ha sabido navegar con éxito en las aguas turbulentas de la política mexicana sin tanque de oxígeno, se sumerge a puro pulmón y emerge con renovados bríos.
Conoce el sector turismo. En el gobierno de Héctor Astudillo Flores, fungió como subsecretario del ramo y luego, director de la Promotora Turística, cargos que lo vincularon con los personajes del selecto mundo turístico.
Marea Alta.- La asociación humanista internacional World Central Kitchen (WCK), reaccionó de inmediato y por segunda ocasión, como lo hizo con “Otis”, para ayudar con alimentos calientes, a cientos de damnificados de comunidades rurales y colonias populares.
La ejemplar ayuda humanitaria de la WCK, con sede en Washington, merece todo el reconocimiento del pueblo de Acapulco, en especial, el fundador y dirigente, el chef español José Andrés, por el invaluable apoyo a las personas siniestradas por el desastre de “John”.
En abril del presente año sufrieron la perdida de siete de sus miembros, en la Franja de Gaza, a causa del bombardeo al convoy de WCK, por el ejército israelí y todo por ayudar a los desprotegidos.
Maremoto.- Con más pena que gloria concluyeron sus periodos de gobierno los alcaldes guerrerenses, muy pocos lograron relegirse, entre ellos, la alcaldesa Abelina López y el alcalde de Tlapa, Gilberto Solano Arreaga. Quisieron y no pudieron, Norma Otilia Hernández Martínez de Chilpancingo, David Gama Pérez de Iguala, Mario Figueroa de Taxco y Efrén Adame Montalbán de Ometepec.
Ex diputados, síndicos, regidores y funcionarios municipales, se fueron a la yumba y a la fría banca del ostracismo, en espera de mejores tiempos para volver a disfrutar del efímero poder político, aunque la serían rechazados por sus pésimas gestiones.