Enfoque || La acción y la obra política de efecto reflejada en la agenda estatal de Evelyn Salgado

 

Carlos Díaz Figueroa

No hay nada que ocultar en Guerrero se ejecuta una política considerable y reciente en razón al medio ambiente al igual revisando avances de seguridad desde la Mesa de Construcción de la paz que dirige Evelyn Salgado Pineda.

En días recientes la ejecutiva del estado dio apertura a un acción con sentimiento común referente al programa de Reforestación en el marco de la reconstrucción ambiental en Acapulco después de lo que aconteció con el huracán Otis.

Quizá a quienes no coinciden o comparten con esta obra humanista ante la inseguridad en el ámbito nacional y la violencia generada en Guerrero, no obstante que la agenda estatal no está basada solamente en el tema de seguridad.

Y efectivamente, el país y el Estado enfrentan compleja situación de incertidumbre que se registra todos los días en las diversas regiones, aunque tampoco se puede descartar la política de bienestar, en el caso, con el medio ambiente.

Acapulco aún enfrenta un reto con la reconstrucción por la magnitud del fenómeno Otis, por lo que, la mandataria estatal en espacios por el escritorio y territorio de tiempo completo implementa y verificá acciones de rescate e imágen.

La gobernadora de Guerrero está consciente del problema de inseguridad y violencia, lo que también le permite y obliga a seguir revisando la estrategia para combatir de manera frontal tal fenómeno a través de una política de certeza.

No se puede generalizar ni tampoco ocultar los actos registrados con el crimen, aunque la agenda estatal tiene causa y razón en fomentar la cultura política vinculada con el tema de reforestación entre otras de carácter humanitario y moral.

Evelyn Salgado ha considerado diversos temas, en el caso, de la política de seguridad, en la que ha dado respuestas muy responsable en ampliar los esquemas de estrategia para combatir y erradicar desde la Mesa de Construcción de la Paz .

Por eso, hay que entender y aceptar lo que vive el estado y no solamente trascender en un solo objetivo en la agenda de gobierno, sino reactivar lo que genera certidumbre con esta reciente acción ejemplar con la política del medio ambiente.

En Guerrero todavía hay demasiados pendientes, de tal manera que no todo es conducente ni tampoco se descarta prioridades como el tema de seguridad, exigencia de forma propia de la ciudadanía por lograr el bienestar común e íntegral.

La gobernadora del estado tiene aún variados desafíos por limar, de lo cual no oculta pero además no tiene la “varita mágica” para convertir a la entidad sin problemas, aunque tiene el optimismo por insistir a través de la acción y la obra situar a un Guerrero más ordenado y seguro.