Contexto Político || Empoderamiento femenino en Guerrero

 

Efraín Flores Iglesias

Mucho se ha hablado en los últimos años del avance que han tenido las mujeres en el terreno político-electoral, lo cual es bueno y vale la pena destacar, porque no ha sido una lucha sencilla.

De acuerdo con el Informe sobre la Brecha de Género Global 2024, que elabora el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), México se posiciona en el lugar 14, de 146 países, con mayores avances en el empoderamiento político de las mujeres.

El pasado mes de abril, la magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Mónica Aralí Soto Fregoso, señaló que “México ha sido pionero en la lucha por la igualdad de género que ha implicado una historia larga y progresiva que ha dado resultados importantes”.

A partir del próximo 1 de octubre y por primera vez en la historia, México tendrá como titular del Poder Ejecutivo federal a una mujer. Me refiero a la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, quien en las elecciones del pasado 2 de junio ganó por amplio margen a otra mujer: Xóchitl Gálvez Ruiz

Desde el 2 de enero de 2022, la ministra Norma Lucía Piña Hernández preside la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), convirtiéndose en la primera mujer en dirigir el máximo tribunal de México. 

Y las primeras palabras de la presidenta de la SCJN al asumir el cargo fue: “Al ser la primera mujer que preside este máximo tribunal, represento también a las mujeres. Me siento acompañada, respaldada por todas ellas y nosotras. Me siento muy fuerte, porque sé que estamos todas aquí demostrando que sí podemos”.

El Congreso de la Unión (Cámara de Diputados y Cámara de Senadores) ha tenido mujeres que han presidido la Mesa Directiva. Y en 2021 se confirmó la paridad real o total, como un principio permanente que busca la igualdad sustantiva entre mujeres y hombres.

Asimismo, el Instituto Nacional Electoral (INE) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) son encabezados por mujeres.

GUERRERO: ¿ENTIDAD MACHISTA?

Durante muchos años, Guerrero fue considerado como un estado machista por la desigualdad de género y la violencia contra las mujeres.

En 2021, la entidad ocupó el número 30 en el país en cuanto a las desigualdades de género, solo por detrás de Oaxaca y Chiapas, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Pero eso quedó superado en la elección de gobernador del 6 de junio de ese año, ya que la mayoría de los electores eligieron por primera vez a una mujer (Evelyn Salgado Pineda) como titular del Poder Ejecutivo estatal.

El pasado 2 de junio resultó electa como senadora de la República por el principio de mayoría relativa, la Mtra. Beatriz Mojica Morga (Morena), quien será la primera mujer en llegar a la Cámara Alta por la acción afirmativa afromexicana.

Bety Mojica, como es conocida popularmente, es una mujer con raíces en la Costa Chica y Tierra Caliente de la entidad y que ha destacado en el servicio público y en la actividad política, ya que ha sido funcionaria estatal, secretaria general nacional de un partido político, candidata a la gubernatura en 2015 y legisladora local y federal.

La elección de hace tres años también fue decisiva para que en el Congreso local hubiera paridad de género. Desde entonces hay 23 mujeres y 23 hombres ocupando una curul. Y en la próxima legislatura (LXIV) se repetirá el mismo esquema.

La actual presidenta del Poder Legislativo guerrerense es la diputada Leticia Mosso Hernández, militante del PT y que se reeligió el pasado 2 de junio.

El próximo 30 de septiembre rendirán protesta 20 mujeres como presidentas municipales en las diferentes regiones de la entidad. 

Se trata de Abelina López Rodríguez (Acapulco), Clara Elizabeth Bello Ríos (Atoyac de Álvarez), Ma. Dolores Nava Benítez (Buenavista de Cúellar), Mercedes Carballo Chino (Chilapa de Álvarez), Ma. Esbeydi Echeverría García (Coyuca de Catalán), Jessica Moreno Nájera (Cualác), Mayte Lucero Arce Jaimes (Cutzamala de Pinzón), Sara Bravo Salinas (Eduardo Neri), Micaela Manzano Martínez (José Joaquín de Herrera) y Ana Lenis Reséndiz Javier (Juchitán).

También Leopoldina Cruz Ventura (Las Vigas), Austreberta López Rogel (Pedro Ascencio Alquisiras), Brenda Janeth Núñez Peñaloza (Pungarabato), Tarsila Molina Guzmán (San Nicolás), Alba Iris Soberanis Hernández (Tecpan de Galeana), Rita Patiño Muñoz (Tetipac), Tania Mora Eguiluz (Tlalchapa), María Rojas Pineda (Xochistlahuaca), Lizette Tapia Castro (Zihuatanejo de Azueta) y Khalia Areli Ramos Decena (Zitlala).

Hoy por hoy, el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), el Tribunal Electoral del Estado y la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Guerrero son presididas también por mujeres.

No hay duda del avance de las mujeres en el terreno político-electoral y tampoco se pone en duda su capacidad para desempeñar cargos públicos.

Lo cierto es que muchas féminas se aferran al poder y son insensibles a la crítica periodística, por lo que utilizan todos los instrumentos a su alcance para denunciar supuesta violencia política en razón de género en donde no la hay, como ocurrió recientemente con la presidenta municipal de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández Martínez, quien mal asesorada por su equipo jurídico y uno que otro cortesano, presentó una queja ante el IEPC contra un grupo de comunicadores y un periódico de la capital del estado. 

Afortunadamente, la citada servidora pública fue derrotada en un juicio que llegó hasta la Sala Superior del Tribunal Electoral del TEPJF) por el Diario de Guerrero y un columnista. El recurso de reconsideración que presentó fue desechado por improcedente.

Ojalá las 23 diputadas y 20 presidentas municipales que entrarán en funciones el próximo 1 de septiembre y 30 de septiembre, respectivamente, entiendan que los cargos públicos son pasajeros y la crítica periodística fortalece la democracia.

Luego entonces, el empoderamiento de las mujeres en política no debe ser sinónimo de intolerancia y soberbia, sino la oportunidad para demostrar que pueden dar mejores resultados a la sociedad.

ENTRE OTRAS COSAS… Trascendió que el ex gobernador Héctor Astudillo Flores y el coordinador operativo estatal de Movimiento Ciudadano, Julián López Galeana, tuvieron este lunes un serio desencuentro por el control de ese instituto político, ya que López Galeana pretende continuar en el cargo.

Resulta que el máximo jefe del astudillismo pretende imponer a uno de sus incondicionales al frente de ese partido que a nivel nacional comanda el longevo senador Dante Delgado Rannauro.

No cabe duda que Héctor Astudillo no tiene llenadera. Recordemos que en la posición número 2 de la lista de diputados locales plurinominales de MC impuso a su amiga y ex colaboradora, Erika Luhrs Cortés, quien a partir del próximo 1 de septiembre será integrante de la LXIV Legislatura.

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