Alejandro y Chilpancingo

 

Celestino Cesáreo Guzmán

Alejandro Arcos Catalán, como candidato a Presidente Municipal de Chilpancingo, fue una buena noticia, le dio certeza a la oposición y ha generado expectativas, emoción, simpatías y un aire fresco a los partidos que lo postulan.

Empresario con vocación social, sin señalamientos de corrupción, inteligente, gestor incansable y con fuerte conexión con sus paisanos Chilpancinguenses.

Una historia interesante que contar, padre de familia, hijo de profesores, joven con orígenes en la sierra, generoso, visionario, exitoso, valiente, de izquierda, liberal, progresista, atrevido, diferente, genuino, capaz, heroico; rompió la narrativa de la 4T en la capital.

Alejandro, no es militante activo de ningún partido y no forma parte de sus nomenclaturas; eso esperaban los capitalinos una propuesta diferente, fácil de comunicar y sin mirar al ominoso pasado.

Con propuestas novedosas y atrevidas ha dado en el clavo, con firmeza y con alegría enfrenta la embestida del gobierno en el poder, con cuidado se deslinda de personajes que ya no suman; tiene claro que no debe ofrecer como futuro el pasado.

Los habitantes de la capital esperan un futuro de paz, armonía, modernidad, servicios, de ahí el compromiso de Alejandro por convertirse en el mejor alcalde de Chilpancingo.

Chilpancingo tiene un lugar en la historia nacional, sin embargo, ha sido excluido de las grandes obras que solo el gobierno federal puede realizar. De ahí que se necesita un alcalde audaz, que toque con éxito la puerta del palacio nacional y por fin la patria ponga su mirada hacia la tierra de los sentimientos de la nación.

La historia de Alejandro conecta con los capitalinos, es un joven sencillo que con esfuerzo y trabajo se plantea transformar Chilpancingo de los Bravo. Su historia, sus sueños es el sueño de miles.

Con Alejandro Arcos Catalan al frente, el pasado domingo la sociedad civil llenó calles y la histórica plaza primer congreso de Anahuac. El candidato a hecho la tarea. Va el turno de los ciudadanos, votemos masivamente el próximo 2 de junio de 2024. Veremos