Enfoque || Extremo nerviosismo por la Senaduría en la coalición perversa

 

Carlos Díaz Figueroa

La guerra sucia electoral, orquestada contra la imagen de Mario Moreno Arcos, no es más que la propia incertidumbre de la anunciada derrota definitiva ante la incapacidad y carente evolución en la alianza perversa (PRI PRD PAN).

La prudencia del equipo y del propio candidato a Senador por el MC es el
llamado a la civilidad, a dejar atrás campañas de confrontación, aunque es evidente que no cesa la guerra sucia desde al interior y exterior del PRI.

Equivocados con el ataque perverso en operación desde la cúpula nacional y el candidato a senador Manuel Añorve Baños, para retirar a Mario Moreno Arcos de la contienda , más allá de afectarlo lo fortaleció “porque lo que resiste fortalece”.

No obstante que se generaron momentos complejos, por unanimidad el Consejo General del Instituto Nacional Electoral aprobó el registro y se garantiza un crecimiento general para ganar la contienda electoral.

Después de la intentona y juguetona estrategia priista, cabe revelar que la imagen particular de Mario Moreno es aceptable y valorada a través de los hechos en el crecimiento en las encuestas y en innumerables recorridos por territorio.

Los estrategas convertidos en soldados entre ellos Ivonne Ortega, Héctor Astudillo, entre otros, envían señales a la “derecha” al no pretender distraer al ciudadano en operaciones perversas y eludir al miedo de frente al adversario.

Es decir, que se concentren en hacer campañas de nivel y con estatura, capaces de ir a las urnas, sin ocultar el intolerante temor con la herramienta o instrumento de la guerra sucia, previó a la pronosticada derrota electoral.

Por lo que, derivado de ello, no hay duda que los ataques malévolos serán el centro a seguir, tirando piedras y escondiendo la mano, en actos de cobardía ante la impotencia en no admitir el fracaso en las urnas el 2 de junio.

A 17 días de la elección el escenario electoral se pone hermético, para la derecha y los de frente, ante el crecimiento de aceptación favorable para MC, lo que es la desesperación en el rostro, particularmente en la coalición (PRI PRD PAN).

De tal manera que los nervios en extremo en tal alianza son producto de admitir la falta de evolucion en la estrategia electoral, ocupándose en la operación perversa enfocados en el primer domingo del próximo mes.