Perdona el obispo Salvador Rangel a quienes le hicieron daño moral; no los denunciará 

En un comunicado también agradece a quienes oraron por su salud y recuperación

 

Marcial Campuzano // El obispo emérito de la diócesis Chilpancingo-Chilapa monseñor Salvador Rangel Mendoza, informó que no presentará ninguna denuncia contra las personas que le causaron daño, tras haber sido víctima de una desaparición forzada en el vecino estado de Morelos. Dijo que perdona a todas las personas que le hicieron mucho daño por los hechos de que fue víctima.

A través de un comunicado, el obispo emérito señaló que después de haber hecho oración, meditado profundamente, y de haber consultado con sus seres queridos tanto del clero como laicos, “y en razón de que lamentablemente mi vida, edad y mi salud están en condiciones desfavorables, con todo mi corazón perdono a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquéllos que me han revictimizado producto de la desinformación”.

Lo anterior es siguiendo los principios evangélicos “de nuestro Señor Jesucristo, que perdonó a las personas que lo traicionaron, lo vendieron, lo juzgaron, lo torturaron y lo asesinaron”.

Salvador Rangel resaltó que en ejercicio de sus derechos constitucionales, no presentará ninguna denuncia “contra las personas que tanto mal me han hecho”. Pidió a los medios de comunicación que lo comprendan y respeten su decisión “encaminada al bien de mi seguridad e integridad física y moral”.

Agradeció a las autoridades tanto legales como eclesiásticas que han colaborado en este caso, y de manera muy especial al maestro Luis Gasca quien ha fungido como su abogado.

También agradeció a todas las personas que se solidarizaron con él, “con especial gratitud a todos aquellos que hicieron oración por mi vida y por mi pronta recuperación”.

El obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa fue reportado como desaparecido el 29 de abril de este año por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM). En la denuncia pública esa institución católica pidió a las autoridades civiles su pronta y decidida intervención para localizarlo. Ese mismo día el CEM dio a conocer que fue encontrado con vida en Morelos.

La Conferencia del Episcopado Mexicano informó que desde el 27 de abril se desconocía el paradero del obispo emérito, por lo que hicieron un llamado a las autoridades de Guerrero, de Morelos y del gobierno federal, para que actuaran en la localización de Salvador Rangel Mendoza.

El 29 de abril el CEM dio a conocer que Salvador Rangel fue localizado con vida en el Hospital General “Dr. José G. Parres” ubicado en Cuernavaca. A partir de su localización, han sido varias las versiones que dan cuenta del presunto móvil de la desaparición del obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa.

Una de las versiones indica que monseñor Salvador Rangel habría entrado voluntariamente a un hotel, y que en su cuerpo fueron hallados residuos de cocaína y de benzodiacepinas.

Otra versión da cuenta que habría sido víctima de un secuestro exprés, y que en su cautiverio fue golpeado.