Enfoque || En respuesta a la incertidumbre del transporte el gobierno privilegió el diálogo

 

Carlos Díaz Figueroa

Al establecerse el transporte público en normalidad, el gobierno del estado reprueba los hechos del crimen y la violencia en estos días en Chilpancingo, por lo que advirtió que nada por encima y al margen de la ley.

Fue a través del diálogo no permitiendo nada por encima del estado de derecho e intimidar a la ciudadanía ante los hechos lamentables y reprobables del orden delictivo registrados en estos días en distintos puntos en la capital

Las paradas se encontraban en libre de acceso a comparación de la concurrencia que día con día se percibe en ellas, por lo que fue evidente que la circulación no operaba de manera considerable a las alturas de cada estación.

A lo referente, el dilema del transporte en la capital ocasionó hechos de malestar y desesperación en los usuarios por no contar con sus traslados a sus destinos, incluso con retardo en los horarios de labores.

Centenares de personas entre trabajadores y estudiantes fueron afectados con esta grave situación de complejidad en los conductores del volante, por lo que, la autoridad de gobierno optó en privilegiar el diálogo.

Aún con el alto riesgo por el crimen y violencia delictiva, la ciudadanía hizo caso omiso, toda vez que por necesidad estaban obligados esperar el transporte para trasladarse a sus centros de trabajo y escuelas.

No obstante, que no solamente trabajadores y estudiantes fueron afectados, sino también paralizado el comercio ante la ausencia de venta y cerrando a determinados horarios por el miedo a la situación en referencia.

“Que lamentable que estemos truncados por este problema de inseguridad más que de transporte”, coincidieron algunas personas esperando la combi o taxi en distintos puntos en las paradas en la capital del estado.

La autoridad debería ser mas enérgica – – continuaron diciendo– molestos ante la impotencia por los actos delictivos que se estaban registrando en Chilpancingo desde los 8 dias que dejó de operar el transporte

A pregunta expresa, respondieron, “no necesariamente se debe culpar a las autoridades, aunque tienen que actuar con los pantalones bien puestos”, insistieron, inconformes ante la incertidumbre delictiva.

Y lo cierto es que la situación de traslado fue un problema severo para los habitantes, sin que hubiera avances en el restablecimiento del transporte ocasionando una verdadera angustia en la ciudadanía en general.

Aunque, el gobieno estatal a través de la Comisión Técnica de Transporte en el estado establecieron medidas necesarias para que la ciudadanía pudiera trasladarse a sus centros de operación laboral y cotidiana.

Sin embargó, los actos del crimen y la violencia fue el obstáculo para mantener la circulación del transporte en normalidad a causa de los excesos de la inseguridad pretendiendo inestabilizar la capital.