Contexto Político || Evelyn, gobernadora de territorio

Por Efraín Flores Iglesias // Guerrero es una de las entidades del país que ha padecido de casi todo: desde gobiernos corruptos y represores, movimientos políticos y sociales, marginación y pobreza, narcotráfico y violencia, pandemias, fuertes sismos, tormentas tropicales y huracanes.

Es cierto, somos un estado rico en recursos naturales y contamos con importantes destinos turísticos, tierras fértiles para la siembra de maíz, frijol, calabaza, y sitios arqueológicos. Pero falta mucho para que salga del atraso social en que se encuentra.

Hace diez años, el 13 de septiembre de 2013, los huracanes Ingrid y Manuel pusieron a prueba a las autoridades estatales y federales, ya que causaron los desastres más destructivos de la historia de nuestro país.

En ese entonces gobernaba a los guerrerenses uno de los gobernadores más irresponsables de los últimos 20 años: el perredista Ángel Heladio Aguirre Rivero. Sí, aquél personaje que mientras llovía y llovía, él bebía y bebía con sus invitados especiales en la residencia oficial de Casa Guerrero. 

En La Pintada, comunidad serrana del municipio de Atoyac de Álvarez, perdieron la vida 71 personas, ya que quedaron sepultadas por el deslizamiento de laderas. Pero hubo más gente que falleció en otros municipios.

El monto económico de los daños estimados fue de 23 mil 441 millones de pesos en la entidad suriana. La infraestructura económica que comprende los sectores de comunicaciones y transportes, la eléctrica y la urbana fueron las más perjudicadas.

Los puentes de Coyuca de Benítez y Coyuca de Catalán, por ejemplo, fueron reconstruidos por el gobierno federal. En Chilpancingo hubo serias afectaciones en varias viviendas y los ciudadanos perjudicados fueron reubicados en otros asentamientos, pero la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) les construyó y entregó posteriormente viviendas defectuosas.

Con Ingrid y Manuel, a los guerrerenses nos llovió sobre mojado. Aunque, dieciséis años antes –9 de octubre de 1997– otro huracán, “Paulina”, también causó muertes y destrucción en su paso por suelo guerrerense, sobre todo, en Acapulco. Y el gobernador de ese entonces también fue el ometepequense Ángel Heladio Aguirre Rivero. ¡Zas!

El Ejército mexicano jugó un importante papel en esos difíciles momentos. Y no se diga los trabajadores de Protección Civil. También hicieron una excelente labor para auxiliar y rescatar a las personas que se encontraban en serio peligro.

“MAX” Y SU IMPACTO EN GUERRERO.- En los últimos dos días se han registrado intensas lluvias en Acapulco y en las regiones de la Costa Grande y la Sierra de la entidad. Y también ha llovido fuerte en Chilpancingo y otros municipios de la región Centro, motivo por el cual se suspendieron clases en toda la entidad.

Lo cierto es que la gobernadora Evelyn Salgado Pineda ha estado muy atenta de la evolución de la tormenta tropical “Max”.

Desde un principio coordinó las acciones para atender y dar seguimiento a la contingencia con el apoyo de las fuerzas armadas y de seguridad, activando los refugios temporales para estar preparados ante los posibles efectos y situación de auxilio a la población.

Por instrucciones de la titular del Poder Ejecutivo estatal, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil activó en la entidad 631 refugios temporales con una capacidad para albergar a 137 mil personas ante cualquier contingencia, particularmente en la región de la Costa Grande hay disponibles 79 refugios, en Acapulco 80 y 146 en la región de la Costa Chica.

La mañana del lunes y sin descuidar la seguridad de las y los guerrerenses, la gobernadora Evelyn Salgado en sesión de la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz revisó el despliegue operativo de las instituciones civiles con el apoyo de las fuerzas armadas en estado de alerta para auxiliar a la población durante la contingencia de lluvias originadas por “Max”.

Este martes por la mañana y de manera personal, Evelyn Salgado se trasladó a la región de la Costa Grande para constatar los trabajos de apoyo a a población, que se realizan de manera coordinada con las dependencias estatales y las autoridades municipales.

La gobernadora estuvo acompañada por el secretario de la Marina, José Rafael Ojeda Durán, el secretario de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez, la presidenta del DIF Guerrero, Liz Salgado Pineda e integrantes del gabinete estatal.

El recorrido inició en la localidad de El Súchil, municipio de Tecpan, y enseguida en el punto conocido como El Cuajilote, donde la mandataria dijo que se redoblarán esfuerzos para garantizar la atención integral hasta lograr el restablecimiento de la conectividad carretera lo más pronto posible, garantizando la comunicación entre todas las comunidades aledañas.

Muy pocas veces se ha visto a un gobernante o gobernadora, en este caso, atendiendo de manera directa las afectaciones que deja una tormenta tropical.

No cabe duda que Evelyn Salgado sí es una gobernadora de territorio y no de escritorio. Una gobernadora que está preocupada de lo que ocurre en Guerrero y que está pendiente de los fenómenos naturales que tocan territorio suriano.

Ojalá todos los funcionarios de su administración sigan su ejemplo para estar en contacto con la gente, y no en la comodidad de sus oficinas en Palacio de Gobierno. 

Comentarios:

efrain_flores_iglesias@hotmail.com