* El problema está detectado en 9 municipios de La Montaña y la Costa Chica: Violeta Pino
* La CRAC castigará con 10 y hasta 15 años de cárcel a las familias que promuevan matrimonios tempranos
* Necesario debilitar la cultura patriarcal en Guerrero, indicó
Marcial Campuzano // En Guerrero será difícil combatir a corto y a mediano plazo la venta de mujeres y los matrimonios forzados entre menores de edad, dijo la secretaria de la Mujer Violeta Pino Jirón, quien reveló que la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) que opera en territorios indígenas, estableció en su reglamento que habrá de 10 hasta 15 años de cárcel para las familias que realicen nupcias entre adolescentes.
La funcionaria aseguró que avanza bien la estrategia en Guerrero para combatir los matrimonios forzados entre menores de edad, con la participación del gobierno federal y de 9 ayuntamientos de la región de La Montaña y de la Costa Chica de Guerrero, para que las mujeres indígenas tengan una vida libre de violencia.
El combate frontal a la vieja práctica por usos y costumbres en las zonas indígenas del estado, de hacer trueques para pactar compromisos matrimoniales entre menores de edad, comenzó el año pasado con 39 acciones que aplican 10 dependencias con la colaboración de autoridades municipales, explicó.
El trabajo que se realiza en este año fue diseñado con planes comunitarios de 24 localidades de 9 municipios, de los cuales 6 corresponden a la región de La Montaña y 3 a la Costa Chica.
Admitió que siguen los matrimonios forzados entre menores de edad, “porque persiste la cultura patriarcal que tenemos que debilitar, porque está muy arraigada no sólo en las zonas indígenas de Guerrero, también en las zonas urbanas y hasta en los espacios universitarios”.
Consideró necesaria la participación masculina en la lucha contra los matrimonios forzados, porque puede contribuir al logro de la igualdad y a la erradicación de todos los tipos de violencia contra las mujeres.
Pino Girón recalcó que en este proyecto trabajan con la gente de las comunidades, porque no es una política impuesta por el gobierno de manera vertical, “sino construida con ellos porque sólo así podemos avanzar”.
La titular de la Secretaría de La Mujer, reconoció que no cuentan con un registro estadístico de los matrimonios forzados entre menores de edad, pero hay comentarios y denuncias en el sentido de que continúa esa práctica de usos y costumbres.
Los municipios donde se registra con mayor frecuencia la unión forzada en matrimonio entre menores de edad son Cochoapa el Grande, Metlatónoc, Alcozauca, algunas comunidades del municipio de Tlapa de Comonfort; Tlacoachistlahuaca, San Luis Acatlán, Igualapa y Atlamajalcingo del Monte, cuyas autoridades municipales proporcionaron los nombres de las comunidades en donde de manera preponderante ocurre ese problema.
Aclaró que los habitantes de las zonas indígenas de Guerrero, fueron advertidos que el trueque por mujeres para consumar matrimonios forzados entre menores es un delito, “pero además los propios sistemas normativos comunitarios como la CRAC, establecieron en sus reglamentos internos que serán sancionadas aquellas familias de niñas y de niños que hagan arreglos para uniones -matrimoniales- tempranas entre menores de edad, con 10 y hasta 15 años de cárcel”.
Violeta Pino consideró esta reforma a los lineamientos de la CRAC como un gran avance en la lucha contra los matrimonios forzados. “Qué mejor que no solamente el gobierno y las dependencias vayamos a hablar de la sensibilización y de la capacitación a estas poblaciones, sino que sea de propio, de dentro, porque recuerden que las Casas de justicia de la CRAC tienen una legítima elección y un legítimo reconocimiento, y qué mejor decirlo por ellos, por eso es una alianza importante contra las uniones tempranas”.
Insistió en que los matrimonios forzados no se acabarán de la noche a la mañana, “sino que tenemos que trabajar autoridades, las familias, mujeres y hombres para avanzar en este tema”.
La secretaria de La Mujer aclaró que los matrimonios forzados son equiparables a la trata de personas, “queremos poner cimientos bien fuertes sobre todo con las comunidades para que esto se erradique, estoy convencida que, así como hemos avanzada las mujeres en muchísimos temas, en este vamos a avanzar, pero no solos, sino con las autoridades comunitarias, con la gente de las comunidades”.