Nadie puede dudar que la enérgica política migratoria del pecoso Donald Trump, ha obliga a miles de centroamericanos a desistir de sus pretensiones de ingresar a territorio norteamericano, pero también han recibido un gran aliciente, los permisos de trabajo ofrecidos por López Obrador y las visas humanitarias, lo que hace atractiva su permanencia en nuestro territorio.
A pesar de ello el gobierno federal se muestra sorprendido ante el incremento de migrantes que transitan por México para ingresar irregularmente a Estados Unidos.
Se estima que en los últimos tres meses han cruzado por nuestro país, 300 mil centroamericanos, lo que no dicen es cuántos de ellos se quedan de manera ilegal y claro en espera de que López Obrador cumpla su palabra, lo cual, si consideramos que en muy pocas ocasiones lo hace, pues bienvenidos más delincuentes y vagos en el país.
La política migratoria de López Obrador o la falta de ella, en algunos aspectos, ayuda a Estados Unidos en su agenda, pero también ha enviado un mensaje a los deseosos migrantes de que ahora son más que bienvenidos que nunca en México.
Esta afluencia récord de familias migrantes tiene vueltos locos a los funcionarios mexicanos y a los albergues que los ayudan que se han visto sobrepasados.
Esta crisis es responsabilidad, en parte, del tabasqueño, quien al parecer olvida que hizo una campaña electoral como defensor de los pobres y los oprimidos., tanto que desde que comenzó su gobierno, las detenciones y deportaciones han disminuido y ha incorporado a más migrantes a la sociedad mexicana al otorgarles visas humanitarias y permisos de trabajo.
Cada vez son más los centroamericanos que eligen a México como destino y no Estados Unidos como ocurrió durante décadas. Difícilmente se puede conocer el número oficial de los mismos.
Desde noviembre pasado, en las recientes caravanas de migrantes, el número de quienes piden asilo en México aumentó y aceptó dar refugio en su territorio a los que solicitan asilo en Estados Unidos.
Entonces saben perfectamente que esas caravanas “madrecitas” como las llamó la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, no sólo le darán en la madre a la deteriorada economía mexicana, sino también afectarán en el ámbito social.
twitter: @matariliblog
facebook: matariliporlirilon
Libre de virus. www.avast.com