Sahid Hernández Rosete
Pedro Caixinha y el Cruz Azul lo volvieron a hacer. La Máquina vino de atrás de un 2-0 en contra, para terminar empatando 2-2 frente a Rayados en el Gigante de Acero, un escenario que se les acomoda y en el que siguen sin conocer la derrota en torneo regular, mientras que la Pandilla hilvana ya tres jornadas sin triunfo.
En una cancha pasada por agua por la pertinaz lluvia que se dejó sentir en la Sultana del Norte, el Monterrey buscó sorprender con un disparo de larga distancia de Leonel Vangioni que Corona desvió de puños y posteriormente César Montes sacó un remate de cabeza directo a la colocación del guardameta cementero.
La Pandilla rondaba el área cruzazulina y al 21’ Madueña sacó de la línea otro remate de cabeza del ‘Cachorro’, que ganó por arriba cuantos balones quiso a la defensiva celeste y al 28’ Funes Mori estrelló otro testarazo en el poste, el gol albiazul podía sentirse cerca.
Los visitantes hicieron poco para inquietar a Marcelo Barovero, un remate de larga distancia de Madueña y un achique realizado a Méndez, fue todo el trabajo que tuvo el ‘Trapito’ en la primera parte para resguardar su portería.
Cuando parecía que no habría movimiento en el marcador en los primeros 45 minutos, vino un centro de Dorlan Pabón por derecha que Avilés Hurtado remató con una espectacular chilena y dejó sin posibilidad a Corona, para el 1-0 en favor de los albiazules.
Iniciando el segundo tiempo el Monterrey asestó un gol de vestidor, pues al 49’ en un tiro de esquina por izquierda, Montes se levantó nuevamente y conectó de cabeza la esférica para el 2-0, que representó un duro golpe anímico para los pupilos de Caixinha.
La Máquina apretó en la recta final y encontró al 76’ el tanto que los devolvió al partido con la anotación de Milton Caraglio de cabeza para el 2-1. El gol estuvo precedido de una falta de Aldrete sobre Rodolfo Pizarro en el área celeste y a pesar de quedar tirado solicitando asistencia, los jugadores de Cruz Azul nunca pararon la jugada.
Al 82’ Funes Mori logró mandar de nuevo el balón a las redes, pero la anotación fue invalidada por un fuera de lugar del argentino, dejando viva la posibilidad para que los capitalinos encontraran el empate en los minutos finales.
Fue al 90’ que se originó un tiro de esquina por derecha y que Igor Lichnovsky remató de cabeza luego de que Stefan Medina se techó en la jugada, para que la esférica entrara pegada al poste derecho para el 2-2 definitivo en el encuentro.