Carlos Díaz Figueroa // En ninguna circunstancia se han dado actos de simulación con la relación en el perredismo y el priismo en esta etapa vigente en un trance de análisis y reflexión que permita fortalecer el escenario político en Guerrero.
Con el reciente encuentro con el aspirante a la dirigencia estatal del PRI, Alejandro Bravo Abarca no deja de ser un acto cordial, respetuoso y de madurez política en un intercambio de opiniones con lo que acontece en el presente.
Fue de entrada el punto de vista considerable en el ex gobernador Angel Aguirre Rivero al reconocer que la vigencia política entre el PRD y el PRI está basada en la construcción, lejos que haya una simulación política en ambos.
Al pedirle su opinión a lo referente en un conocido lugar en el puerto de Acapulco, aseguró que la vigencia no solamente es un encuentro de opiniones, sino, también es muestra de la civilidad en aceptar los liderazgos de ambos partidos.
“Aún y más allá de lo que no logró la alianza conformada no se puede asegurar que hubo actos de simulación, el resultado nos obliga a entrar en un minucioso análisis y reflexión en opiniones encontradas entre los actores políticos”.
Con un temple sereno, Angel Aguirre respondió a lo que viene aconteciendo y que dado a la crítica y señalamiento, no obstante, que para el ex gobernador la vigencia política representa la continuidad en un diálogo de encuentro.
“No se puede seguir perdiendo tiempo en confrontaciones estériles, no hay nada que ocultar, el presente nos obliga a construir y dibujar formas y visiones políticas en coincidencia que permita en su momento circunstancias viables”.
Pará, Angel Aguirre Rivero, la mejor forma de hacer política es la continuidad a través de coincidencia en un diálogo permanente en común, separando los errores del pasado y construyendo con madurez política los tiempos del presente.