Sindicatos: ¿el arte de chantajear?
Por Efraín Flores Iglesias
——————
Los que de plano ya se acostumbraron a chantajear para obtener beneficios personales, son algunos dirigentes de sindicatos, esos que a los cuatro vientos gritan que defienden a sus agremiados.
Lo primero que hacen es recurrir a los medios de comunicación para anunciar que tomarán las instalaciones de un Ayuntamiento o una Dependencia, pretextando que la parte patronal les adeuda salarios, primas vacacionales, aguinaldos, bonos, despensas, entre otras cosas.
Desde luego que a los trabajadores que dicen representar los persuaden con tal de que vayan a apoyar el plantón o la manifestación.
Pero en el fondo, algunos de esos dirigentes sindicales sólo buscan negociar en lo oscurito para obtener otro tipo de beneficios, sobre todo, que les dupliquen o tripliquen salarios, meter a familiares en la nómina y negociar plazas (o bases) para sus allegados.
Durante varios años hemos sido afectados como ciudadanos por las tomas de edificios públicos y bloqueos de calles.
Que conste, no estoy en contra de los trabajadores de algún sindicato en particular, sino contra aquellos personajillos que se ostenta como líderes y que solamente han lucrado con los movimientos que han encabezado en nombre de los derechos laborales.
El lunes, por ejemplo, un sindicato denominado “Independiente” realizó una protesta afuera del Palacio Municipal de Chilpancingo.
¿Y qué demandan? De acuerdo a Amada Ramos Zamora, dirigente del sindicato en mención, lo que exigen es homologación salarial para todos sus agremiados y que “les hagan valer” las 10 recategorizaciones que el ex presidente Marco Antonio Leyva Mena les concedió antes de dejar el cargo.
De acuerdo a una nota del reportero Fernando Polanco Ochoa, de la Agencia de Noticias IRZA, Ramos Zamora exige ganar más de 30 mil pesos mensuales, y no los 19 mil 128 pesos que recibe actualmente. ¡Zas!
Mientras tanto –refiere la nota–, el alcalde Antonio Gaspar Beltrán aseguró que no puede aprobar un aumento salarial que esté por encima del techo presupuestal.
“Antes se daban aumentos y bases sin techo presupuestal y de manera, yo pienso, clientelar y en el ánimo de mantener una buena relación con la base trabajadora para tener gobernabilidad, e incluso hasta comprometerlos políticamente”, refirió.
Ojalá el alcalde Gaspar Beltrán no se deje chantajear por dirigentes sindicales que solamente utilizan a sus bases para lograr beneficios personales.
Comentarios: E-mail: efrain_flores_iglesias@hotmail.com; Facebook: Efraín Flores Iglesias; Twitter: @efiglesias